Comprar renting furgoneta frigorifica

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¡Ya puede comprar la VebaBox para la furgoneta frigorífica del futuro!

Al comprar una furgoneta frigorífica, lo primero que nos viene a la mente es un vehículo nuevo que luego se adapta con aislamiento y una unidad de refrigeración integrada como parte del sistema y funcionamiento del motor del vehículo. Esta es la forma tradicional de convertir un vehículo en una furgoneta frigorífica. En estos casos, todo el conjunto de piezas y componentes están total e inseparablemente integrados con el vehículo, la carrocería y el motor del vehículo. Esto tiene como inconveniente una rápida depreciación del valor del vehículo. De hecho, el valor de un vehículo frigorífico usado en el mercado de segunda mano le resultará decepcionante ya que no suele superar, e incluso puede llegar a ser inferior, al de un vehículo seco (no frigorífico) al cabo de cinco años. Uno de los motivos son los elevados costes de reparación que pueden acarrear las furgonetas frigoríficas usadas en caso de avería. En cualquier caso, el sistema de refrigeración suele amortizarse en unos cinco años.

Sin embargo, si hoy día se propone a comprar un vehículo frigorífico, en muchos casos también le ofrecerán una alternativa en la que todo el sistema de refrigeración, es decir, la caja aislada/isotérmica y la unidad de frío, puede sacarse del vehículo y trasladarse también al siguiente. En la práctica, se trata de una especie de cámara o contenedor o caja frigorífica que integra todo lo necesario y que simplemente se coloca en el espacio de carga y se alimenta de la corriente del vehículo. La VebaBox es el ejemplo más conocido. Las ventajas son:

• Su vehículo mantendrá un alto valor de reventa y a veces incluso mayor, ya que el espacio de carga permanece intacto y, por tanto, como nuevo.
• Vida útil larga desde el punto de vista técnico. De 10 a 15 años o más. En consecuencia, ofrecen una depreciación mucho más lenta y, por lo tanto, suponen un coste anual mucho menor que si compramos una furgoneta frigorífica.

Por otro lado, la VebaBox ofrece una serie de ventajas a nivel técnico con respecto a la furgoneta frigorífica:

• Seguir enfriando durante paradas Como resultado, se evitan los picos y las desviaciones de temperatura
• Enfría y calienta automáticamente en función de la temperatura ambiente
• Prestaciones de refrigeración y congelación muy potentes. Funcionan perfectamente a temperaturas ambiente entre -20 y 40 ºC.
• Servicio rápido. Gracias a un sistema de suspensión rápido, en caso de avería, la unidad de frío puede sustituirse en 10 minutos. Esto evita tener el vehículo fuera de servicio, como ocurriría si compráramos un camión frigorífico tradicional.
• Robusta estructura de poliéster combinada con bisagras y cierres de acero inoxidable

La flexibilidad y la seguridad de una VebaBox en comparación con lo que supondría comprar una furgoneta frigorífica tradicional.

• Opción de intercambio por una VebaBox más grande o más pequeña en el futuro, así como de recompra.
• Instalación y conexión en cuestión de horas en su propio taller especializado de confianza o en uno de nuestros talleres colaboradores por toda España.
• ¡Perfectamente preparado para transferirla a su futuro vehículo eléctrico! (La VebaBox no influye en la autonomía de su vehículo eléctrico, ya que funcionaría con su propia batería externa).

Adquiera su VebaBox a través del renting por a partir de 90 euros al mes

Al comprar una furgoneta frigorífica tradicional, el vehículo completo, incluido el sistema de refrigeración estarán en el contrato de renting. Significa que nos enfrentaríamos a unas cuotas mensuales elevadas debido a la rápida depreciación del vehículo con el sistema de refrigeración tradicional. Si nos decidimos por la instalación de una VebaBox en su propio vehículo, podemos dedicarnos a nuestras rutas ¡ya a partir de 90 euros al mes!